Las deducciones fiscales por Investigación, Desarrollo e Innovación tecnológica (I+D+i), reguladas por el Artículo 35 de la Ley del Impuesto sobre Sociedades (LIS), constituyen uno de los principales instrumentos para fomentar la innovación empresarial en España. Gracias a ellas, cualquier empresa, independientemente de su tamaño o sector económico, puede reducir significativamente su carga fiscal si invierte en proyectos innovadores.
Los proyectos elegibles para estas deducciones se dividen en dos categorías principales. Por un lado, están los proyectos de Investigación y Desarrollo (I+D), caracterizados por un alto grado de incertidumbre y por aportar avances relevantes en ciencia o tecnología. Ejemplos típicos incluyen la creación de nuevos materiales, el desarrollo de medicamentos o tecnologías avanzadas como creación de algoritmos de inteligencia artificial.
Por otro lado, encontramos los proyectos de Innovación Tecnológica (IT), que, aunque no implican necesariamente una novedad científica disruptiva, sí representan mejoras sustanciales en productos, procesos o servicios existentes. Ejemplos habituales son la automatización avanzada de procesos industriales o la incorporación innovadora de tecnologías digitales en procesos productivos, así como el desarrollo de software y/o plataformas informáticas.
El beneficio económico para las empresas que aplican estas deducciones es considerable: entre un 25% y un 42% de los gastos incurridos en proyectos de I+D y un 12% en proyectos de IT pueden recuperarse como reducción directa en la cuota del Impuesto sobre Sociedades. Adicionalmente, estas deducciones son compatibles con otras ayudas públicas e incluso pueden monetizarse, con ciertas limitaciones, en caso de insuficiencia de cuota tributaria.
No obstante, aplicar correctamente estas deducciones requiere documentación técnica y económica rigurosa, capaz de demostrar la naturaleza innovadora y los gastos reales asociados al proyecto. Una de las mayores dificultades suele ser distinguir claramente entre I+D e IT y justificar técnicamente la categoría asignada ante posibles inspecciones fiscales. Además, el proceso administrativo y burocrático asociado a estos incentivos puede resultar complejo, con terminología técnica especializada y trámites rigurosos que pueden abrumar a las empresas sin experiencia previa. En COOIDi Consultores somos expertos en gestionar toda esta complejidad, simplificando el proceso y asegurando el cumplimiento normativo.
En COOIDi Consultores somos expertos en gestionar este tipo de incentivos fiscales. Desde la identificación inicial de los proyectos hasta la preparación de memorias técnicas completas y la obtención de Informes Motivados Vinculantes, acompañamos a las empresas innovadoras para maximizar el beneficio fiscal y minimizar riesgos.
Porque innovar es invertir en futuro, y hacerlo de manera segura y eficiente es clave para el éxito empresarial.

